VenePirámides
El 9 de junio de 2003 Víctor Alvarez, para entonces viceministro de industria, prometió que a finales de ese año estaría en el mercado una canasta de electrodomésticos con "productos fabricados en el país a precios más solidarios".
No obstante el viernes de la semana pasada, ocho años después, el presidente de la República Hugo Chávez, anunció que el Gobierno le comprará a China tres millones de electrodomésticos, para abastecer al mercado venezolano de lavadoras, secadoras, cocinas, neveras, aires acondicionados, televisores, DVD y calentadores.
Con el masivo ingreso de electrodomésticos chinos el Gobierno pondrá en marcha el plan Mi Casa Bien Equipada, que permitirá adquirir los electrodomésticos a bajo precio y con financiamiento de la banca pública a una tasa de interés de 15% y de 18% en el caso de las entidades financieras privadas.
En los planes de importación el Gobierno también ha ido a paso lento. En 2009 promocionó el plan Mercal Hogar y en los últimos dos años sólo se han vendido a través de esta iniciativa 17 mil 386 electrodomésticos.
El Ejecutivo no ha olvidado la idea de desarrollar la industria nacional pero evidentemente los hechos marchan a una velocidad mucho menor a los anuncios.
El 14 de mayo de 2010 Hugo Chávez aseguró que "dentro de 14 meses será inaugurada una fábrica de electrodomésticos en los Valles del Tuy del estado Miranda".
Sin embargo, el viernes pasado prometió que la fábrica será inaugurada en septiembre de 2012 y tendrá capacidad para elaborar 800 mil productos al año.
Las estadísticas del Banco Central demuestran que la industria no solo no ha crecido sino que ha retrocedido en los últimos cinco años.
Al cierre de 2010 la producción industrial se ubicó en el nivel más bajo desde 2005, alejando la posibilidad de que el país diversifique sus exportaciones y cuente con una fuente para la creación de nuevos puestos de trabajo.
Analistas consideran que las limitaciones para el acceso a las divisas, la competencia que representan las importaciones baratas adquiridas con una moneda sobrevaluada y un entorno hostil que no alienta la inversión explican el resultado.
Un vuelo rasante sobre las estadísticas desnuda la magnitud de la crisis. En 10 de las 16 áreas en las que el BCV divide a la industria privada, la producción se encontraba por debajo de la alcanzada en 1997 al cierre de 2010, según reportó el diario El Universal.
El 9 de junio de 2003 Víctor Alvarez, para entonces viceministro de industria, prometió que a finales de ese año estaría en el mercado una canasta de electrodomésticos con "productos fabricados en el país a precios más solidarios".
No obstante el viernes de la semana pasada, ocho años después, el presidente de la República Hugo Chávez, anunció que el Gobierno le comprará a China tres millones de electrodomésticos, para abastecer al mercado venezolano de lavadoras, secadoras, cocinas, neveras, aires acondicionados, televisores, DVD y calentadores.
Con el masivo ingreso de electrodomésticos chinos el Gobierno pondrá en marcha el plan Mi Casa Bien Equipada, que permitirá adquirir los electrodomésticos a bajo precio y con financiamiento de la banca pública a una tasa de interés de 15% y de 18% en el caso de las entidades financieras privadas.
En los planes de importación el Gobierno también ha ido a paso lento. En 2009 promocionó el plan Mercal Hogar y en los últimos dos años sólo se han vendido a través de esta iniciativa 17 mil 386 electrodomésticos.
El Ejecutivo no ha olvidado la idea de desarrollar la industria nacional pero evidentemente los hechos marchan a una velocidad mucho menor a los anuncios.
El 14 de mayo de 2010 Hugo Chávez aseguró que "dentro de 14 meses será inaugurada una fábrica de electrodomésticos en los Valles del Tuy del estado Miranda".
Sin embargo, el viernes pasado prometió que la fábrica será inaugurada en septiembre de 2012 y tendrá capacidad para elaborar 800 mil productos al año.
Las estadísticas del Banco Central demuestran que la industria no solo no ha crecido sino que ha retrocedido en los últimos cinco años.
Al cierre de 2010 la producción industrial se ubicó en el nivel más bajo desde 2005, alejando la posibilidad de que el país diversifique sus exportaciones y cuente con una fuente para la creación de nuevos puestos de trabajo.
Analistas consideran que las limitaciones para el acceso a las divisas, la competencia que representan las importaciones baratas adquiridas con una moneda sobrevaluada y un entorno hostil que no alienta la inversión explican el resultado.
Un vuelo rasante sobre las estadísticas desnuda la magnitud de la crisis. En 10 de las 16 áreas en las que el BCV divide a la industria privada, la producción se encontraba por debajo de la alcanzada en 1997 al cierre de 2010, según reportó el diario El Universal.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario