VenePirámides
La complicada situación financiera de Pdvsa desde 2009 ha provocado que todavía tenga importantes deudas con empresas proveedoras de servicios. Guillermo Romero, presidente de la multinacional de taladros petroleros BakerHughes Venezuela, dijo que "ha mejorado la deuda en los últimos dos trimestres, pero se mantiene. No hay acuerdos de pago sino la buena voluntad y comunicación con Pdvsa, que ha mostrado su esfuerzo en honrar los compromisos".
No obstante Romero señaló que "le solicitamos a Pdvsa el pago de las deudas viejas que son las que más nos afectan financieramente. Hay pasivos que se han ido limpiando desde 2008, pero todavía nos quedan deudas de 2009. Es una deuda fuerte que todavía no ha podido ser eliminada", pero que entienden que "del flujo de caja de Pdvsa" el Gobierno tiene que atender varios sectores.
Pero a pesar de la buena voluntad del Pdvsa, las deudas acumuladas tienen un efecto sobre la actividad productiva. La disminución de pagos a las compañías de servicios provocó que éstas "tuvieran que autofinanciarse y pagar todos los activos que ingresaban al país, y eso afectó la calidad y la eficiencia en la industria" reconoce Romero, quién agrega que "si una compañía tiene dificultades de cobranzas y tiene que autofinanciarse, es temerosa de traer nuevos activos porque aumentaría su exposición".
El ejecutivo petrolero cree que esta situación podría revertirse "en la medida que se estabilice el flujo de pagos de Pdvsa a las compañías de servicios, generando mayor confianza".
Por otra parte, los problemas de logística por falta de suministros, u otros factores que afectan la eficiencia de la industria; aunados a la lentitud de pagos de Pdvsa, reducen el atractivo de Venezuela como mercado frente a países con recursos en hidrocarburos como Brasil, Colombia, Ecuador o Perú.
Romero apunta que "indudablemente desde el punto de vista del negocio hay que analizar dónde se genera la mejor rentabilidad para el negocio y en función de ello se dispondrán los equipos de perforación para determinados países. El temor en definitiva es que los equipos sean rentables y que el retorno de la inversión sea aceptable para poder invertir en nuevos equipos en el país. Y ese es uno de los problemas que ha tenido Venezuela, porque la demora en los pagos ha hecho que las corporaciones den prioridad a otros países". Pese a ello, Romero destaca que "BakerHughes apuesta a Venezuela porque con las reservas que tiene el país, está por encima de cualquier vecino".
Sobre los equipos de perforación activos en el país, Romero aclara que BakerHughes contabiliza unos 250 equipos físicos. "Y lo que considera (como equipos activos) Pdvsa ronda los 160, para perforar activamente, y si sumas los equipos para completar los pozos serían unos 240", según reportó el diario El Universal.
Añade que la diferencia entre el conteo que realiza BakerHughes (realizado semanalmente y consolidado una vez al mes, y que en octubre arrojo 82 equipos activos); y el de Pdvsa es que la industria estatal "no contrata un equipo solo para perforar, sino que además hacen el perfilaje, la segmentación, y muchas veces también la completación de ese pozo. Lo cuenta como activo durante dos meses, por ejemplo, porque está haciendo otras funciones. En cambio BakerHughes contabiliza como activos todos aquellos equipos que están más de 15 días en exclusivamente en perforación".
La complicada situación financiera de Pdvsa desde 2009 ha provocado que todavía tenga importantes deudas con empresas proveedoras de servicios. Guillermo Romero, presidente de la multinacional de taladros petroleros BakerHughes Venezuela, dijo que "ha mejorado la deuda en los últimos dos trimestres, pero se mantiene. No hay acuerdos de pago sino la buena voluntad y comunicación con Pdvsa, que ha mostrado su esfuerzo en honrar los compromisos".
No obstante Romero señaló que "le solicitamos a Pdvsa el pago de las deudas viejas que son las que más nos afectan financieramente. Hay pasivos que se han ido limpiando desde 2008, pero todavía nos quedan deudas de 2009. Es una deuda fuerte que todavía no ha podido ser eliminada", pero que entienden que "del flujo de caja de Pdvsa" el Gobierno tiene que atender varios sectores.
Pero a pesar de la buena voluntad del Pdvsa, las deudas acumuladas tienen un efecto sobre la actividad productiva. La disminución de pagos a las compañías de servicios provocó que éstas "tuvieran que autofinanciarse y pagar todos los activos que ingresaban al país, y eso afectó la calidad y la eficiencia en la industria" reconoce Romero, quién agrega que "si una compañía tiene dificultades de cobranzas y tiene que autofinanciarse, es temerosa de traer nuevos activos porque aumentaría su exposición".
El ejecutivo petrolero cree que esta situación podría revertirse "en la medida que se estabilice el flujo de pagos de Pdvsa a las compañías de servicios, generando mayor confianza".
Por otra parte, los problemas de logística por falta de suministros, u otros factores que afectan la eficiencia de la industria; aunados a la lentitud de pagos de Pdvsa, reducen el atractivo de Venezuela como mercado frente a países con recursos en hidrocarburos como Brasil, Colombia, Ecuador o Perú.
Romero apunta que "indudablemente desde el punto de vista del negocio hay que analizar dónde se genera la mejor rentabilidad para el negocio y en función de ello se dispondrán los equipos de perforación para determinados países. El temor en definitiva es que los equipos sean rentables y que el retorno de la inversión sea aceptable para poder invertir en nuevos equipos en el país. Y ese es uno de los problemas que ha tenido Venezuela, porque la demora en los pagos ha hecho que las corporaciones den prioridad a otros países". Pese a ello, Romero destaca que "BakerHughes apuesta a Venezuela porque con las reservas que tiene el país, está por encima de cualquier vecino".
Sobre los equipos de perforación activos en el país, Romero aclara que BakerHughes contabiliza unos 250 equipos físicos. "Y lo que considera (como equipos activos) Pdvsa ronda los 160, para perforar activamente, y si sumas los equipos para completar los pozos serían unos 240", según reportó el diario El Universal.
Añade que la diferencia entre el conteo que realiza BakerHughes (realizado semanalmente y consolidado una vez al mes, y que en octubre arrojo 82 equipos activos); y el de Pdvsa es que la industria estatal "no contrata un equipo solo para perforar, sino que además hacen el perfilaje, la segmentación, y muchas veces también la completación de ese pozo. Lo cuenta como activo durante dos meses, por ejemplo, porque está haciendo otras funciones. En cambio BakerHughes contabiliza como activos todos aquellos equipos que están más de 15 días en exclusivamente en perforación".
Eso del conteo de taladros es la tipica explicacion temerosa de represalias: AMIGO, NO SE PUEDE CONTAR EL MISMO TALADRO DOS O TRES VECES!!! Esa es una gran farsa de PDVSA con el solo proposito de inflar numeros. Y punto!! Un pozo no se perfora ni termina en menos de 15 dias, la cuenta correcta es esa: 84 taladros y punto, los demas estan inactivos, parados o deteriorados.. esa cuenta de 160 por PDVSA es una mentira mas.
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