martes, 10 de agosto de 2010

En la Asamblea Nacional hay una opinión clara sobre la Ley de Mercado de Valores: NPI


VenePirámides
El diario El Mundo (por suscripción) reportó que la Asamblea Nacional está sumida en dudas, presiones, ruidos y desconocimiento respecto de la reforma de la Ley de Mercado de Valores. Su debate en la Asamblea Nacional (AN) fue diferido para hoy. Sólo quedan esta sesión y la del jueves para sancionarla antes del receso legislativo.

Este proyecto de ley fue aprobado en primera discusión hace más de un mes, y desde entonces ha rodado por el Ejecutivo, de despacho en despacho. Sigue flotando en aguas turbulentas.

Fue hasta la semana pasada, cuando el presidente Hugo Chávez dictó línea, que la norma llegó finalmente a manos de todos los diputados y a su debate en segunda discusión, en la Plenaria de la AN. Pero una vez más se enfrió. En el debate del artículo 20, el presidente de la Comisión de Finanzas, Ricardo Sanguino, solicitó diferirla para este martes. La razón: se había agotado la hora reglamentaria. Sin embargo, en los pasillos de la AN se habló de reuniones urgentes con el Ejecutivo, de corrección de errores y de nuevas propuestas que debían ser evaluadas para incluirlas en la ley y que, a final de cuentas, en la Asamblea Nacional no tienen NPI de la materia sobre la que están legislando.

Muchos apuestan a que se quedará en el congelador hasta el regreso en septiembre, pero otros aseguran que el grupo del Parlamento que trabaja la ley y el Ejecutivo laborarán tiempo extra para sancionarla. El ruido y las presiones siguen dadas por la prohibición que se hace a las casas de bolsa para participar en las colocaciones de títulos de la Deuda Pública Nacional (DPA) y otras emisiones de la República.

Además de la creación de la Bolsa Pública y un sistema de custodia público (Caja de Valores) que se encargará de todas las operaciones con papeles de la República, y que aunque no elimina las estructuras privadas existentes, termina de limitar sus funciones y enterrar el negocio.

Las operaciones en el mercado accionario han mermado considerablemente en los últimos años, y eran precisamente las operaciones con bonos del Estado las que habían oxigenado tanto a la Bolsa como a las casas de bolsa. Sobre todo después de la aplicación del control de cambio, cuando estos instrumentos fueron una fórmula para obtener divisas.

Las dudas son muchas, pero incluso los mismos diputados no saben explicar cómo funcionará la nueva bolsa pública, ni quiénes la integrarán. El proyecto de ley dice que se regirá por una normativa que emita la Superintendencia Nacional de Valores con la opinión vinculante del Órgano Superior del Sistema Financiero Nacional. Los diputados desconocen cuáles serán los lineamientos para el funcionamiento de este ente, pero dicen que no estará integrado por las casas de bolsa. Otros aseguran que la bolsa pública se encargará de atender el mercado primario y será el escenario para la colocación de las nuevas emisiones de papeles que haga el Estado o alguna de sus empresas autorizadas para ello. Aunque se ha dicho que sólo se usará para operaciones en bolívares, ello no está definido así en la ley.

Pero otra duda asalta a los parlamentarios: qué pasará con el Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (Sitme). Pues consideran que sería innecesario dos estructuras en el sistema público que se ocupen de operaciones con títulos. Unos creen que el Sitme se mantendrá para las operaciones de mercado secundario, que se encarga de ubicar usuarios con títulos que quieran venderlos y transarlos con otras personas naturales o jurídicas que tengan necesidad de divisas.

Otro grupo considera que lo lógico es que en la medida que el Estado logre crear y esté operativa la bolsa pública, el Sitme traspasará sus funciones a esta estructura para luego desaparecer. El sistema que opera el Banco Central de Venezuela (BCV) se creó con la intensión de controlar lo que el Gobierno ha llamado "las perversiones" que existían en el mercado de valores. Y la bolsa pública y la caja de valores pública también tienen como objetivo tener vigiladas y controladas las operaciones con títulos de la República.

La Bolsa de Valores de Caracas no desaparece de hecho, pero sólo se dedicará a la venta y cesión de acciones o emisiones de títulos privados.

Otra duda que surgió fue si se crea una caja de valores pública o un sistema de custodia de títulos públicos, entonces se estaría cabalgando sobre una competencia del BCV. Pero de esto tampoco tienen respuesta.

A esto se sumó la inclusión en el texto legal de la posibilidad de brindar financiamiento a las empresas socialistas y comunidades organizadas a través de ofertas públicas. Esto generó duda, pues la ley en su artículo 2 prohíbe la participación de éstas en el mercado de valores.

Aunque hace la salvedad de que el Ejecutivo podrá hacer excepciones. Las repuestas a estas dudas se darían hoy, si se incluye la ley en el Orden del Día. Mientras tanto las respuestas que los asambleístas dan a las interrogantes son uniformes: NPI

2 comentarios:

  1. Están pensando introducir un nuevo instrumento llamado el Bolimutuo. Es muy simple. las empresas del estado emitiran bonos a Bs. 4.30, que venderan a Bs. 6 y podran recomprar con $ a Bs. 4.3 en los mercados afuera, ganando asi mucho dinero en cada Vuelta, lo que les permitira solventar todos sus problemas financieros.

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  2. Eso es mas o menos lo que hizo algunas veces PDVSA en el 2009.. en vez de vender dolares al BCV a 2,15 hacia la siguiente bicicleta financiera: emitia bonos dolarizados pagables en bolivares, los vendia a 4-5 Bs, y luego los recompraba en dolares afuera. De esa manera convertia sus dolares a 4-5 Bs en lugar de los 2.15 que le daba el BCV

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