VenePirámides
El diario El Mundo Economía y Negocios (por suscripción) reporta que a más de tres meses del ajuste cambiario "los objetivos no fueron alcanzados". La devaluación de la moneda -decretada el pasado ocho de enero- que dio origen a dos tipos de cambio oficial no ha podido estabilizar el precio del dólar paralelo, aumentar el flujo de divisas al mercado local, reactivar las exportaciones ni contener el alza de la inflación.
Con la modificación de la política cambiaria, que según analistas económicos debió ejecutarse hace bastante tiempo, se reduciría la brecha entre el dólar oficial y el permuta.
El objetivo era llevar este último a 5 bolívares fuertes, según lo anunciado por el presidente Hugo Chávez en un discurso en la Asamblea Nacional.
Para ello, el Gobierno creó una lista de bienes prioritarios que reciben dólares de la Comisión de Administración de Divisas a Bs.F. 2,60 y a Bs.F. 4,30.
Sin embargo, otras importaciones consideradas no esenciales para el funcionamiento de la economía debieron realizar sus operaciones a través del mercado permuta.
Cálculos de analistas revelan que alrededor del 15% de esas operaciones pasarán este año por este mercado, lo cual impacta de manera importante en el precio de la divisa y en la inflación.
El profesor del Iesa Pavel Gómez indica que aún es incierto conocer cuáles son los objetivos que se propuso el Gobierno con el ajuste. Varios funcionarios esbozaron algunas metas por lograr a corto y mediano plazo, pero no fueron anunciadas oficialmente de manera de eliminar la incertidumbre en el mercado cambiario.
"Cadivi no ha podido suplir la demanda de divisas de manera expedita, por lo que buena parte de la demanda pasa por el dólar paralelo. Esto es lo que explica los movimientos hacia el alza en su cotización. El Gobierno tampoco pudo evitar la volatilidad del dólar no oficial, por lo que desde este punto de vista no se cumplieron los objetivos propuestos a corto plazo", dijo Gómez.
¿Exito o fracaso?
Las autoridades monetarias y financieras también cifraron sus esperanzas en que el ajuste permitiría una mayor entrega de divisas. La realidad hasta ahora es que el retraso de la adecuación de la plataforma tecnológica de Cadivi a la nueva paridad cambiaria ha impedido un aumento de las autorizaciones y las presiones sobre el dólar paralelo persisten haciendo que su precio supere la barrera de los 7 bolívares fuertes.
Cifras de Cadivi muestran que el promedio diario de divisas autorizadas alcanzan los 120 millones a 130 millones de dólares, lo que refleja poco incremento si se compara con los resultados del pasado año.
El Gobierno también apostó a que con la devaluación sería reactivada la actividad económica, pero factores como la crisis eléctrica nacional atentaron contra este objetivo, por lo menos en el primer trimestre del año, cuando esperan se profundice la recesión registrada desde finales de 2009.
Muchos aseguran que la devaluación consiste en una corrección cambiaria. Otros consideran que la medida permitirá al Ejecutivo contar con mayores recursos para enfrentar sus gastos en los momentos previos a la campaña electoral por las elecciones parlamentarias del mes de septiembre, al tiempo que cubrirá una buena parte de su déficit fiscal.
El economista José Guerra consideró acertada la decisión del Gobierno de ajustar el tipo de cambio, ya que era insostenible mantener un dólar a 2,15 bolívares fuertes.
Sostiene que la medida debió estar acompañada de otras que permitieran lograr los objetivos propuestos entre ellos, la mejora de las exportaciones, reducción de las importaciones y mejorar así la posición externa del país.
Para Guerra, "cuando hay devaluación y no es acompañada de otras medidas que la complementen, al final se pierde la finalidad del ajuste. Además, lamentablemente, en el país no existen ya productos que exportar luego del daño ocasionado a sectores como el manufacturero y el agrícola".
Para el economista Jesús Faría, el ajuste permitió eliminar las distorsiones en el mercado cambiario, que colocaban en desventaja a la producción nacional para competir con los bienes importados. "Esto permitirá crear las condiciones para que el aparato productivo nacional inicie su recuperación. Ahora, esto no tendrá un efecto inmediato ni automático; será progresivo, especialmente porque venimos de una crisis económica mundial".
José Guerra coincide en que aún no está claro el mecanismo de entrega de divisas por parte de Cadivi, lo que aunado a la poca oferta realizada por el BCV con las subastas de los bonos cambiarios impactó al mercado paralelo.
"Con las subastas, se reconoció un mercado en el cual se intervendría para bajar el dólar no oficial. Sin embargo, esta estrategia también fracasó. El Gobierno decidió a su vez eliminar los mutuos porque a su juicio creó distorsiones, pero la cotización volvió a repuntar. Entonces este no era el problema. Lo que se observa es que el BCV y el Ministerio de Finanzas no encuentran cómo estabilizar el mercado paralelo".
Para Jesús Faría, la intervención del BCV en el mercado paralelo sí ha evitado la volatilidad de la divisa e insiste en que la especulación ha afectado su cotización.
No obstante, Pavel Gómez sostiene que no se observan señales de la implementación de algún mecanismo de bonos programado que evite la incertidumbre.
El diario El Mundo Economía y Negocios (por suscripción) reporta que a más de tres meses del ajuste cambiario "los objetivos no fueron alcanzados". La devaluación de la moneda -decretada el pasado ocho de enero- que dio origen a dos tipos de cambio oficial no ha podido estabilizar el precio del dólar paralelo, aumentar el flujo de divisas al mercado local, reactivar las exportaciones ni contener el alza de la inflación.
Con la modificación de la política cambiaria, que según analistas económicos debió ejecutarse hace bastante tiempo, se reduciría la brecha entre el dólar oficial y el permuta.
El objetivo era llevar este último a 5 bolívares fuertes, según lo anunciado por el presidente Hugo Chávez en un discurso en la Asamblea Nacional.
Para ello, el Gobierno creó una lista de bienes prioritarios que reciben dólares de la Comisión de Administración de Divisas a Bs.F. 2,60 y a Bs.F. 4,30.
Sin embargo, otras importaciones consideradas no esenciales para el funcionamiento de la economía debieron realizar sus operaciones a través del mercado permuta.
Cálculos de analistas revelan que alrededor del 15% de esas operaciones pasarán este año por este mercado, lo cual impacta de manera importante en el precio de la divisa y en la inflación.
El profesor del Iesa Pavel Gómez indica que aún es incierto conocer cuáles son los objetivos que se propuso el Gobierno con el ajuste. Varios funcionarios esbozaron algunas metas por lograr a corto y mediano plazo, pero no fueron anunciadas oficialmente de manera de eliminar la incertidumbre en el mercado cambiario.
"Cadivi no ha podido suplir la demanda de divisas de manera expedita, por lo que buena parte de la demanda pasa por el dólar paralelo. Esto es lo que explica los movimientos hacia el alza en su cotización. El Gobierno tampoco pudo evitar la volatilidad del dólar no oficial, por lo que desde este punto de vista no se cumplieron los objetivos propuestos a corto plazo", dijo Gómez.
¿Exito o fracaso?
Las autoridades monetarias y financieras también cifraron sus esperanzas en que el ajuste permitiría una mayor entrega de divisas. La realidad hasta ahora es que el retraso de la adecuación de la plataforma tecnológica de Cadivi a la nueva paridad cambiaria ha impedido un aumento de las autorizaciones y las presiones sobre el dólar paralelo persisten haciendo que su precio supere la barrera de los 7 bolívares fuertes.
Cifras de Cadivi muestran que el promedio diario de divisas autorizadas alcanzan los 120 millones a 130 millones de dólares, lo que refleja poco incremento si se compara con los resultados del pasado año.
El Gobierno también apostó a que con la devaluación sería reactivada la actividad económica, pero factores como la crisis eléctrica nacional atentaron contra este objetivo, por lo menos en el primer trimestre del año, cuando esperan se profundice la recesión registrada desde finales de 2009.
Muchos aseguran que la devaluación consiste en una corrección cambiaria. Otros consideran que la medida permitirá al Ejecutivo contar con mayores recursos para enfrentar sus gastos en los momentos previos a la campaña electoral por las elecciones parlamentarias del mes de septiembre, al tiempo que cubrirá una buena parte de su déficit fiscal.
El economista José Guerra consideró acertada la decisión del Gobierno de ajustar el tipo de cambio, ya que era insostenible mantener un dólar a 2,15 bolívares fuertes.
Sostiene que la medida debió estar acompañada de otras que permitieran lograr los objetivos propuestos entre ellos, la mejora de las exportaciones, reducción de las importaciones y mejorar así la posición externa del país.
Para Guerra, "cuando hay devaluación y no es acompañada de otras medidas que la complementen, al final se pierde la finalidad del ajuste. Además, lamentablemente, en el país no existen ya productos que exportar luego del daño ocasionado a sectores como el manufacturero y el agrícola".
Para el economista Jesús Faría, el ajuste permitió eliminar las distorsiones en el mercado cambiario, que colocaban en desventaja a la producción nacional para competir con los bienes importados. "Esto permitirá crear las condiciones para que el aparato productivo nacional inicie su recuperación. Ahora, esto no tendrá un efecto inmediato ni automático; será progresivo, especialmente porque venimos de una crisis económica mundial".
José Guerra coincide en que aún no está claro el mecanismo de entrega de divisas por parte de Cadivi, lo que aunado a la poca oferta realizada por el BCV con las subastas de los bonos cambiarios impactó al mercado paralelo.
"Con las subastas, se reconoció un mercado en el cual se intervendría para bajar el dólar no oficial. Sin embargo, esta estrategia también fracasó. El Gobierno decidió a su vez eliminar los mutuos porque a su juicio creó distorsiones, pero la cotización volvió a repuntar. Entonces este no era el problema. Lo que se observa es que el BCV y el Ministerio de Finanzas no encuentran cómo estabilizar el mercado paralelo".
Para Jesús Faría, la intervención del BCV en el mercado paralelo sí ha evitado la volatilidad de la divisa e insiste en que la especulación ha afectado su cotización.
No obstante, Pavel Gómez sostiene que no se observan señales de la implementación de algún mecanismo de bonos programado que evite la incertidumbre.
Sr. Bernardo: ¿Podría dar su opinión sobre la acusación que le hicieran a uno de los bancos de inversión "refugio" en EEUU?
ResponderBorrarGracias de antemano.
No se que opina Bernardo, pero el producto ni siquiera estaba registrado, era una colocacion privada.
ResponderBorrarCreo que la SEC y el gobierno americano andan buscando un chivo expiatorio.
ResponderBorrarEstá acusando a Goldman Sachs de no haberle informado a los compradores que el producto se había diseñado a solicitud de un cliente que quería apostar en contra del mercado de hipotecas. Todo producto se diseña a solicitud o por la necesidad de un comprador o un vendedor. El que lo compró apostaba a que los valores subirían de precio; los vendedores apostaban a lo contrario. Esa es la esencia del mercado de valores. No veo dónde está la ilegalidad